Hoy, a la hora convenida, me encontré con Zeben en la gasolinera que está a la salida del pueblo. Me tocaba escoltar a la Kikina (la T2B semi-panel) hasta el puerto para embarcar rumbo a tierras esteladas...
La verdad es que daba gusto verla airosa en medio de la autopista, rodeada por centralitas electrónicas, turbodiésels e híbridos varios, demostrando que su 4 cilindros boxer aircooled con caja de fusibles por central lleva casi 40 años impertérrito ajeno a tanto chip de silicio....
Me gustaba imaginarla como en una postal sepia mientras subíamos por la curva del Sauzal a la vista del Drago. Cual retrato de Dorian Gray sólo envejecía en la foto, no en la realidad...
Tras llegar a Santa Cruz tomé yo la delantera para quiarla y llevarla hasta la terminal de embarque. Allí la dejamos, no sin descubrir antes que hasta el guardamuelles tenía historias que contar vividas con furgones VW...
¡Que tengas buena suerte Kikina! A dónde vas ya te quieren, y esa es la garantía para vivir otros 40 años más. Seguiremos en la distancia tu rejuvenecimiento y tus nuevas andanzas... y con ésta última mirada la dejamos lista para embarcar.
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